No dejes que te pase como a los dos vascos del chiste. Me pregunto por qué renunciar a dos de los grandes placeres de la vida si pueden ser compatibles. A continuación, mi selección para disfrutar de unas buenas setas, en una tarde de otoño lluviosa, escuchando a Keith Jarrett (The Complet Recordings At The Blue Note. Tokyo), mientras al cocinarlas sientes en tu muñeca el peso de uno de los cinco modelos que Rolex ha colocado en la historia de la relojería.
¿A qué hemos venido, Patxi? ¿A setas o a Rolex? ¿Quiénes somos? ¿De dónde venimos? ¿Adónde vamos? ¿Estamos solos en la galaxia o acompañados? No tengo ni puñetera idea, pero lo que si se, es que igual que hay setas que te acompañan al otro barrio, hay Rolex más falsos que un duro de goma, así que… ojito.
1.- Haz sonar las Trompetas de la Muerte. No me digas que el nombre no es apetitoso. De color negro azabache, como mucho de 3×4 cm, larguiruchas, la Craterellus Cornucopiode, se despierta habitualmente en los bosques de coníferas cuando la lluvia los riega en abundancia. Si las pones a sudar en la sartén y a revolverse con unos huevos de corral, creerás en la levitación.
El Cisne Azul. Gravina 19. 915213799. Preguntar por Juan Pulido o por su hijo Miguel Ángel. No hay reservas, si no consigues mesa, tienen un segundo local en la misma calle.
2.-Daytona (1963). Es el cronógrafo por excelencia, no solo de Rolex, sino también de la historia de la relojería, creado para satisfacer las necesidades de los pilotos de alta competición en homenaje a las 24 horas de Daytona (Florida), aunque estas no comenzaron hasta tres años después de que Rolex lanzase su primer modelo.
Vintage Rolex. Sport Models. Martin Skeet & Nick Urul. Editorial Schiffer. 264 pag. 80 euros.
3.-Rovellon. Basta recrearse con el nombre científico (Lactarius Deliciosus) para empezar a salivar. Pertenece a la familia Russulaceae, su tamaño no excede de los 15 cm, y es muy común. Entró en mi imaginario gustativo la primera vez que vi a José Sazatornil buscándolos en una escena de La Escopeta Nacional. Si vas a recogerlas nunca utilices una bolsa de plástico sino una cesta de mimbre. La bolsa impedirá que al cortarla caigan las esporas y el año que viene haya más. Si usas la de plástico se extinguirán y este artículo se extinguirá también.
La Escopeta Nacional. Luis García Berlanga. 1978.
4.- Submariner. No hay duda, es el Rolex favorito de los españoles, asi que resulta muy frecuente verlo pasear por las calles de la mano de su dueño. También se lo habrás visto a James Bond desde que en 1954 fuera presentado en la feria de Basilea. A partir de 5.000 euros puedes encontrarlo de segunda mano hasta los casi 50.000 que piden por las piezas más buscadas por coleccionistas.
Esquire Big Watch Book. Spainmedia.es
5.- El Rebozuelo es el mejor ejemplo para convencer a alguien que diga que no le gusta el otoño. Su nombre latino hace referencia a la copa que forma su cabeza (Cantharellus cibarius) y no es difícil encontrarlo bajo bosques de encinas, robles o alcornocales. Su color puede variar según el Ph del terreno del blanco al amarillo hasta el naranja Su tamaño oscila entre los 6 y los 10 cm.
Gold Gourmet en Madrid. Calle Ortega y Gasset 87. Pregunta por Luis Pacheco.
6.- El Rolex Explorer es, desde 1953, el hermano del Submariner y del Daytona. Continúa la estrategia de Rolex de identificar profesiones de aventura y riesgo para trasladar la precisión de su manufactura y su posicionamiento de marca. Se ganó muy rápido el prestigio en los cincuenta por el hermetismo de su caja para proteger su mecanismo del agua.
bobswatches.com es uno de los portales que más Rolex factura por internet. Su reputación es merecida.
7.- La Colmenilla es, por su extraordinario parecido a las colmenas de las abejas, el nombre popular de esta seta negra que es particularmente difícil de encontrar. No te dejes asustar por el aspecto feúcho de la Morchella porque son un verdadero manjar. Y, ojo, no te las tomes crudas que tienen una toxicidad alta. Si te da por ir al campo no te hagas el listillo y ve acompañado de alguien que sepa lo que recoge.
Setas. Guía de Campo. Editorial Blume. 2007
8.-El Milgauss, creado en 1954, fue el primer reloj antimagnético, pensado para que fuese usado por los empleados de las centrales nucleares. Alucinante. Su nombre es un compuesto entre la palara latina Mille y la unidad de medida creada por Carl Friedrich Gauss. Su manilla naranja, en forma de rayo, lo convierte en inconfundible entre los que, como yo, cuando nos cruzamos con un hombre le miramos antes la muñeca que el móvil.
9.- La Amanita de los césares (Agaricus Caesareus) ha pasado a la historia por ser la favorita de los emperadores romanos. Muy apreciada en la alta gastronomía es alucinante ver esta seta, también llamada Oroja por su cabeza –que puede llegar hasta los 20 cm- anaranjada, salir de un huevo, o de lo que parece un huevo. La he dejado para el final porque encontrarla es tan difícil como encontrarse un Rolex en el monte. Su precio está por encima de 50 euros el kilo, según las lluvias del año.
Guía TAPAS para comerse y beberse España. Spainmedia. 290 paginas. 10 euros.
10.-Cosmograph. Aunque Rolex había lanzado alguno de estos modelos a mediados de los 30, el primer Cosmograph oficial, el 6239, no llegó hasta 1960. Sus tres esferas lo hacen inconfundible. En los años previos a la conquista de la luna la NASA mandó a sus empleados a comprar en las joyerías este reloj para someterlo a pruebas con el fin de elegir uno modelo para que los astronautas lo llevaran a la luna. Desafortunadamente para Rolex solo el Omega Speedmaster pasó las pruebas.