1985. Las 12:15. Calle Padre Xifré. Pepe, el portero, custodia la puerta. No hay móviles. Ni siquiera se imaginan. La cabina de teléfonos es la única conexión con el mundo. En el cartel están anunciados Lords of the New Church. La tribu gótica está dentro. Yo fuera.
Paco Pérez Bryan me ha dado dos órdenes: «Manda una crónica a las 12:15. Sardinita está enfermo y no puede ir. Dile a Pepe que te deje entrar». Pepe pasó de mí como yo de hacer la mili. Sardinita estaba enfermo. La cabina se comió todas mis monedas. Envié la crónica telefónica del concierto. Desde fuera. Repito. Desde fuera. Eso recuerdo de los ochenta. Ochenta pesetas engullidas a toda hostia.
Carta publicada en L’Officiel Homme por Andrés Rodríguez